Por Mario Caballero LTS-CC
El gobierno patronal de Calderón -a través de la STPyS, la Sría. de Economía y la JFCA- ha desconocido la huelga de Cananea, que la sección 65 del SNTMMSRM lleva a cabo desde hace 21 meses ante la cerrazón de la empresa “Mexicana de Cananea” del Grupo México, los responsables del impune asesinato industrial de Pasta de Conchos. Ya antes, la patronal había intentado cuatro declaraciones de inexistencia de huelga, que el sindicato revirtió amparándose. El Grupo México y el gobierno pretenden, en una sola maniobra, reventar la huelga echando a la calle a 1300 trabajadores, liquidar el contrato colectivo de trabajo, imponer un convenio leonino al servicio de la empresa, y golpear al STMMSRM para imponer una dirección totalmente pro-patronal. Esta ofensiva empezó con la negativa de la STyPS a darle la toma de nota a la dirección representada por Napoleón Gómez Urrutia, y con la negativa al amparo contra ese arbitrario fallo. Ahora, ante la demanda promovida por el priísta Salvador Rocha Díaz y el fallo de la JFCA, decretaron rota la relación laboral entre el sindicato y el empresario Germán Larrea, pretextando que, durante la huelga, se dañaron las instalaciones de la mina.
Una vez más, los abogados patronales y las instituciones muestran que son una herramienta al servicio de los planes anti-obreros de los capitalistas. Su brazo ejecutor, la PFP, está afuera de la mina, lista para reprimir a los huelguistas y hacer “respetar la ley” de los ricos. No les importa repetir una acción sangrienta como la de Sicartsa en el 2006. De imponerse esta medida contra las conquistas de los trabajadores minero metalúrgicos, no solamente golpean a Napoleón Gómez, a quien quieren meter la cárcel, sino que busca sentar un precedente para ir eliminando -en los hechos-, el derecho de huelga y las conquistas plasmadas en los contratos colectivos. Ante esta ofensiva, hay que decir que sólo la base trabajadora –sin ninguna injerencia estatal y patronal- es la que debe decidir libremente que actitud tener frente a Napoleón, su enriquecimiento a costa de las conquistas de los trabajadores y su avasallamiento de la democracia interna.
Lejos de apoyar la huelga de Cananea, un sector de la UNT, como es la dirección del SNTSS se hace parte de este gobierno anti-obrero y represor, como muestra el hecho de que el secretario general del sindicato del Seguro Social, Valdemar Fragoso, va como candidato plurinominal por el PAN, mientras el secretario general del sindicato en León, Gto., va como candidato a la presidencia municipal por este mismo partido. Por otra parte, sindicatos como el SME han declarado que rechazan este fallo de la JFCA, y expresan su “solidaridad plena y sin ambages” con los compañeros de Cananea y con el Sindicato Minero. Pero terminan instando al pleno de la Cámara de Diputados para que intervenga, mediante la aprobación de un “Punto de Acuerdo” para que se restablezca la “Legalidad Constitucional”.
La ofensiva contra los trabajadores requiere respuestas más contundentes. Es necesario que salgamos a la calle los sindicatos, incorporando a los no sindicalizados y los desempleados, para protestar contra esta medida arbitraria. Los mineros de Cananea están realizando importantes acciones de resistencia, pero las hacen solos; solamente las secciones mineras 271, 272, 273 y 274 de Lázaro Cárdenas, Michoacán, pararon en solidaridad con sus compañeros de Cananea. No debemos dejarlos solos. ¿Acaso esperaremos a que ataquen el derecho a huelga de los electricistas, del magisterio disidente, de los trabajadores universitarios, o de las maquiladoras, para hasta entonces pasar de las palabras a los hechos? Las organizaciones del Diálogo Nacional deben convocar a una reunión de emergencia para coordinar la solidaridad con los compañeros de Cananea y definir las medidas en la defensa de sus derechos. Que no pase lo que alertaba Bertold Brecht en el poema que popularizó: “…Luego vinieron por mí, pero, para entonces, ya no quedaba nadie a quien decir nada”
La suspensión provisional del fallo de la JFCA, que demanda el sindicato, así como evitar un probable intento de desalojo en Cananea, puede lograrse con la movilización de la clase trabajadora.
Una vez más, los abogados patronales y las instituciones muestran que son una herramienta al servicio de los planes anti-obreros de los capitalistas. Su brazo ejecutor, la PFP, está afuera de la mina, lista para reprimir a los huelguistas y hacer “respetar la ley” de los ricos. No les importa repetir una acción sangrienta como la de Sicartsa en el 2006. De imponerse esta medida contra las conquistas de los trabajadores minero metalúrgicos, no solamente golpean a Napoleón Gómez, a quien quieren meter la cárcel, sino que busca sentar un precedente para ir eliminando -en los hechos-, el derecho de huelga y las conquistas plasmadas en los contratos colectivos. Ante esta ofensiva, hay que decir que sólo la base trabajadora –sin ninguna injerencia estatal y patronal- es la que debe decidir libremente que actitud tener frente a Napoleón, su enriquecimiento a costa de las conquistas de los trabajadores y su avasallamiento de la democracia interna.
Lejos de apoyar la huelga de Cananea, un sector de la UNT, como es la dirección del SNTSS se hace parte de este gobierno anti-obrero y represor, como muestra el hecho de que el secretario general del sindicato del Seguro Social, Valdemar Fragoso, va como candidato plurinominal por el PAN, mientras el secretario general del sindicato en León, Gto., va como candidato a la presidencia municipal por este mismo partido. Por otra parte, sindicatos como el SME han declarado que rechazan este fallo de la JFCA, y expresan su “solidaridad plena y sin ambages” con los compañeros de Cananea y con el Sindicato Minero. Pero terminan instando al pleno de la Cámara de Diputados para que intervenga, mediante la aprobación de un “Punto de Acuerdo” para que se restablezca la “Legalidad Constitucional”.
La ofensiva contra los trabajadores requiere respuestas más contundentes. Es necesario que salgamos a la calle los sindicatos, incorporando a los no sindicalizados y los desempleados, para protestar contra esta medida arbitraria. Los mineros de Cananea están realizando importantes acciones de resistencia, pero las hacen solos; solamente las secciones mineras 271, 272, 273 y 274 de Lázaro Cárdenas, Michoacán, pararon en solidaridad con sus compañeros de Cananea. No debemos dejarlos solos. ¿Acaso esperaremos a que ataquen el derecho a huelga de los electricistas, del magisterio disidente, de los trabajadores universitarios, o de las maquiladoras, para hasta entonces pasar de las palabras a los hechos? Las organizaciones del Diálogo Nacional deben convocar a una reunión de emergencia para coordinar la solidaridad con los compañeros de Cananea y definir las medidas en la defensa de sus derechos. Que no pase lo que alertaba Bertold Brecht en el poema que popularizó: “…Luego vinieron por mí, pero, para entonces, ya no quedaba nadie a quien decir nada”
La suspensión provisional del fallo de la JFCA, que demanda el sindicato, así como evitar un probable intento de desalojo en Cananea, puede lograrse con la movilización de la clase trabajadora.
¡Reconocimiento a la resistente huelga de Cananea!
¡Solución a sus demandas!
¡Respeto a su contrato colectivo de trabajo!
¡No a la represión¡.
¡Fuera la PFP de Cananea!
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